Morena, Pasión Andina

jueves, octubre 11

EL VOCEADOR

“¡16, de Julio, Plaza Ballivian, Alto Lima….1”, “¡Tarapaca, cruce Taquiña, Senkata….!”, son algunas de las rutas que anuncian los voceadores, aquéllos que algunas veces nos atormentan con su gritería, pero que se han convertido una parte de la vida diaria.

Pero, ¿qué es un voceador? Es un niño o joven encargado de anunciar las rutas de las diferentes líneas de minibuses, microcrobuses y colectivos que existen.
En la parada de una de las líneas de minibús he aprovechado para hacer dos preguntas a un voceador de aproximadamente 18 años de edad.

¿Cuántas horas trabajas?, dice “empiezo a las 8 de la mañana, más antes a veces, y estoy hasta las 8 de la noche”.

¿Y qué vas a hacer cuando ya no seas voceador? Él responde “Estoy aprendiendo a manejar el minibús, yo no más quiero manejar después”.

Hace tiempo, se llegó a tratar el tema de la jornada laboral de los voceadores, pues muchos de ellos llegaban a trabajar 10 horas o más diarias. Pero esto se desvaneció en algún lugar y la rutina continua. La norma legal dice que los niños no pueden trabajar, pero hay voceadores de 8, 9, 10 años trabajando largas horas por un pago ínfimo. Hay necesidades económicas en los hogares y no queda otra que salir a buscar el sustento diario. Hace años, José, el hijo de una vecina, tenía aproximadamente 13 años, abandonó el colegio y lo vi trabajando de voceador en la línea de micro de la zona. El tiempo ha pasado rápido, y ahora él conduce un micro de la línea 531. Y en realidad, el futuro de un voceador es ser chofer asalariado y si tiene suerte llegar a ser propietario de un minibús o microbus.

¿Porqué es necesario el voceador en El Alto?
Al ser una región de migración constante de las áreas rurales, hay personas que no saben leer y ahí, el voceador se convierte en alguien muy útil a la comunidad. Los novidentes también se benefician de este servicio, de igual manera, los ancianos que no pueden ver o escuchar bien.

¿Y qué hace el voceador?
Aparte de anunciar las rutas, cobrar los pasajes, abrir y cerrar la puerta del minibús, ayuda generalmente en bajar y subir nuestros “q´ipis” (bolsas de todo tipo) cuando se lo pedimos.

Se puede seguir escribiendo sobre esto, pero aquí lo dejo.

4 comentarios:

Suprareal dijo...

Interesante lo que escribiste acerca de los voceadores. La verdad uno se encuentra todo el tiempo con ellos cuando sube o baja del minibus y es que son bien necesarios. Para personas que no son de esta ciudad, como yo, el intentar aprender las lineas y el sistema de numeración de los minibuses es imposible. Lo máximo que se atina a hacer es escuchar la ruta que el voceador indica y uno se sube al minibus.

Ahora si es correcto o no que trabajen niños, es un verdadero dilema, ya que sabemos que trabajan porque necesitan y si esto representa una oportunidad para luego tener un empleo de chofer, creo que es una buena opción.

Muy bueno tu blog y saludos.

Una cosa mas, no se pueden ver las letras de la palabra para entrar a los comentarios, creo que esta del mismo color del fondo. Revisalo.

boliviaindigena dijo...

Gracias por visitar este blog.
Lo de los niños trabajadores siempre van a ser un tema para hablar y escribir. La necesidad es la que siempre va a estar presente en esos casos.
En relación a tu observación, soy estudiante en esto, y estoy experimentando. voy a hacer las correcciones.

Saludos,

Anónimo dijo...

Siempre tenia la duda, por que hay voceadores solamente en La Paz y no en otras ciudades como Cochabamba?

En Cochabamba, el chofer tiene que colectar los pasajes

boliviaindigena dijo...

Eduardo,
En La Paz, creo que hay muchas, quizàs demasiadas lìneas de minibuses, aparte de los micros y buses. Creo que por esto, se necesita un voceador para anunciar y atraer a los pasajeros.
creo que ese no es el caso de otras ciudades en Bolivia.

Rosita Pochi

Waliki